El fichaje de Irene Lozano enfurece al PSOE andaluz y lo aleja aún más de Ferraz

Los socialistas andaluces no daban crédito al enterarse por los medios de comunicación o, en todo caso, cuando la decisión ya estaba tomada, de que quien había declarado públicamente que “el PSOE considera que Andalucía es su cortijo” fuera a figurar nada menos que en el cuarto puesto de la candidatura del partido por Madrid.

La decisión del secretario general, Pedro Sánchez, de fichar a la exdirigente de UPyD Irene Lozano ha enfurecido a los socialistas andaluces, que hacían visible ayer su enfado a través de su número dos y hombre de confianza de Susana Díaz, Juan Cornejo, que ayer se ausentaba de manera ostensible y deliberada de la reunión de la Comisión Federal de Listas para no votar a favor de la lista en la que estaba Lozano.

‘INSULTÓ A LOS ANDALUCES’

El propio Cornejo, en declaraciones difundidas por la Cadena SER, explicaba que “nunca iba a votar contra una lista que encabeza su secretario general –en referencia a Pedro Sánchez–, pero que tampoco a avalar la candidatura de una señora que ha insultado a los andaluces, a los votantes del PSOE y miles de socialistas honestos”.

En la reunión de hoy del Comité Federal los socialistas andaluces votarán a favor de la lista de Madrid. No quieren llevar más lejos su tremendo enfado, sobre todo en un momento político tan delicado como este, con unas elecciones generales a dos meses vista en las que el Partido Socialista no renuncia a ser primera fuerza aprovechando la debilidad de un PP acosado por problemas internos, escándalos de corrupción y dudas sobre la recuperación económica.

LA FORMA Y EL CONTENIDO

En el PSOE andaluz no ha gustado ni la forma –no consultar al partido– ni el contenido –Irene Lozano– de la decisión de Ferraz, con quien se agranda aún más un alejamiento que ninguna de las dos partes oculta aunque ambas procuran, al menos desde hace algún tiempo, que públicamente se note lo menos posible.

En medios socialistas andaluces se considera que “Irene Lozano no es Ángel Gabilondo”, en alusión al fichaje del exminsitro de Educación y catedrático de Metafísica para liderar la lista de la Comunidad de Madrid en sustitución del defenestrado Tomas Gómez. En la calle San Vicente molestó entonces la forma pero no el contenido: sabían que Gabilondo era mucho mejor candidato, pero hubieran preferido convencer a Tomás Gómez de que se fuera por su propio pie y no asistir a la ‘decapitación’ sumarísima de quien había sido ratificado como secretario general en unas primarias.

En el memorial de agravios de Ferraz hacia San Vicente que el PSOE de Susana Díaz guarda a buen recaudo pero no olvida ir actualizando cuando la ocasión lo requiere, la inclusión de Irene Lozano en las listas de Madrid ocupará un lugar sobresaliente. Las críticas de la exdiputada de UPyD al PSOE andaluz llegaron demasiado lejos y fueron demasiado hirientes como para hacérselas perdonar. La pregunta no es solo si Lozano pedirá disculpas, sino si esas disculpas le serán aceptadas.