Conil avanza en la regularización de 4.500 viviendas ilegales
El Gobierno municipal de IU legalizará casas en el campo «para dar tranquilidad a los vecinos»
El Ayuntamiento de Conil de la Frontera ha aprobado por unanimidad en su último Pleno el avance del planeamiento para regularizar unas 4.500 viviendas construidas en suelo no urbanizable.
En una nota, el Ayuntamiento concreta que se ha aprobado la delimitación de los asentamientos urbanísticos existentes en el suelo no urbanizable del municipio, así como la Ordenanza reguladora de las Normas Mínimas de Habitabilidad y Salubridad de las Edificaciones en Suelo no Urbanizable.
Para el concejal de Urbanismo, Antonio Alba (IU), esta iniciativa va a suponer «la tranquilidad de muchos vecinos que tienen su vivienda en situación irregular, porque de esta forma podrán ordenar las edificaciones susceptibles de regularizar para que, por ejemplo, las puedan escriturar, contar con servicios básicos y, en definitiva, puedan contar con una base legal».
Añade que se resuelve así «una demanda histórica de los vecinos de Conil y que solo se puede dar solución aplicando el decreto de la Junta de Andalucía» en este sentido.
Concreta Alba que lo que se ha aprobado definitivamente por el Pleno ha sido, en primer lugar, el avance de planeamiento que declara en situación asimilada a «fuera de ordenación de usos», construcciones e instalaciones establecidas en suelo no urbanizable.
Esto afecta a las construcciones en el campo que no se encuentran inmersas en ningún proceso sancionador, que no están en suelo de especial protección o inundable y que tienen más de seis años de antigüedad, que es el tiempo establecido en el decreto de la Junta por el cual ha prescrito el supuesto delito contra la ordenación del territorio.
La segunda de las ordenanzas aprobadas permite iniciar el proceso de regularización. Indica que el propietario tendrá que aportar la documentación de identificación del inmueble afectado, la documentación de terminación de la edificación y la certificación que acredite que reúne las condiciones de seguridad, habitabilidad y salubridad.
Con estas dos ordenanzas, los titulares de este tipo de construcciones en el campo podrán solicitar en el Ayuntamiento un certificado por el cual podrán iniciar diferentes trámites como registrar la propiedad de la vivienda y pedir los servicios y suministros básicos, como agua, luz, etcétera.
En una nota, el Ayuntamiento concreta que se ha aprobado la delimitación de los asentamientos urbanísticos existentes en el suelo no urbanizable del municipio, así como la Ordenanza reguladora de las Normas Mínimas de Habitabilidad y Salubridad de las Edificaciones en Suelo no Urbanizable.
Para el concejal de Urbanismo, Antonio Alba (IU), esta iniciativa va a suponer «la tranquilidad de muchos vecinos que tienen su vivienda en situación irregular, porque de esta forma podrán ordenar las edificaciones susceptibles de regularizar para que, por ejemplo, las puedan escriturar, contar con servicios básicos y, en definitiva, puedan contar con una base legal».
Añade que se resuelve así «una demanda histórica de los vecinos de Conil y que solo se puede dar solución aplicando el decreto de la Junta de Andalucía» en este sentido.
Concreta Alba que lo que se ha aprobado definitivamente por el Pleno ha sido, en primer lugar, el avance de planeamiento que declara en situación asimilada a «fuera de ordenación de usos», construcciones e instalaciones establecidas en suelo no urbanizable.
Esto afecta a las construcciones en el campo que no se encuentran inmersas en ningún proceso sancionador, que no están en suelo de especial protección o inundable y que tienen más de seis años de antigüedad, que es el tiempo establecido en el decreto de la Junta por el cual ha prescrito el supuesto delito contra la ordenación del territorio.
La segunda de las ordenanzas aprobadas permite iniciar el proceso de regularización. Indica que el propietario tendrá que aportar la documentación de identificación del inmueble afectado, la documentación de terminación de la edificación y la certificación que acredite que reúne las condiciones de seguridad, habitabilidad y salubridad.
Con estas dos ordenanzas, los titulares de este tipo de construcciones en el campo podrán solicitar en el Ayuntamiento un certificado por el cual podrán iniciar diferentes trámites como registrar la propiedad de la vivienda y pedir los servicios y suministros básicos, como agua, luz, etcétera.
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