La coordinadora general interpreta su éxito en las primarias como la apuesta por un modelo descentralizado, que reconozca "la mayoría de edad" de la formación andaluza
Teresa Rodríguez ha barrido en las primarias de Podemos Andalucía (con el apoyo de un 75 por 100 de los votos registrados) y ese triunfo está dispuesto a transformarlo en autonomía política frente a la ejecutiva de Pablo Iglesias, a la que permanentemente vincula con un modelo de partido centralista, paternalista y presidencialista, a tenor de las metáforas que la secretaria general andaluza viene utilizando en el debate interno.
Tras arrasar con su candidatura a la Presidencia de la Junta en representación de Podemos, Teresa Rodríguez está dispuesta a desprenderse definitivamente de la tutela de la ejecutiva de Madrid a la hora, no ya sólo de gestionar sus finanzas, sino también de confeccionar sus listas o negociar posibles alianzas electorales.
Rodríguez pidió este martes a su partido a estos efectos que reconozca «la mayoría de edad» de la formación andaluza, «conquistada y legitimada» por el voto mayoritario de quienes defienden un partido mucho más autónomo de la dirección estatal.
Hasta tal punto la dirigente andaluz ha interpretado estas primarias en clave de plebiscito, que incluso llegó a comparar los resultados con el referéndum que permitió a Andalucía acceder al máximo nivel de competencias dentro del estado autonómico. «No se trataba solo de elegir una lista», afirmó a este respecto, «sino también de decir que somos mayores de edad». Lo ocurrido en la organización a nivel autonómico ha sido, según sus palabras, «una especie de 28-F», evocando así la fecha del histórico referéndum andaluz.
Rodríguez entiende su éxito en las primarias como un aval a un modelo de partido mucho más descentralizado y a su apuesta por un formato de confluencia con Izquierda Unida que, en el caso andaluz, avanza con más determinación y ritmo que el que se observa a nivel nacional, lo que ha provocado la suspicacia de la ejecutiva de Iglesias. De hecho, se teme que la coordinadora andaluza pretenda diluir Podemos Andalucía en una plataforma electoral junto a organizaciones andalucistas y de izquierdas -que ya tiene nombre: Adelante Andalucía- a partir de la cual dinamitar su dependencia orgánica de la dirección de Madrid.
Teresa Rodríguez se ha convertido, además, en uno de los principales referentes del sector anticapitalista dentro de la formación y, con su triunfo incontestable en estas primarias, está dispuesta a ejercer el enorme poder que supone tener detrás a la militancia andaluza. Un total de 11.522 militantes de Podemos Andalucía participaron en la votación, lo que supuso un nivel de participación del 81 por 100, siendo el número total de inscritos con derecho a voto de 14.241.
Ya durante la campaña, Rodríguez se refirió al afán centralista del secretario general con una frase que describe muy bien el marco actual de sus relaciones: «Por evitar las baronías territoriales en Podemos, estamos oficiando una monarquía». Tras su triunfo reclamaba este martes «un impulso andalucista al proceso de confluencia, sin disolver la identidad de nadie».
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